Últimas semanas para que los autónomos aporten a planes de pensiones y reduzcan su próxima RENTA

Los autónomos están a tiempo todavía de aplicar varias estrategias, antes de que acabe el año, para reducir la factura de su próxima declaración de la renta.

Así lo refleja la guía de la Asociación Española de Asesores Fiscales (AEDAF). El documento recopila 46 medidas, deducciones y recomendaciones para planificar el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) de un ejercicio fiscal al que le quedan pocas semanas para terminar.

Aunque la mayoría están dirigidas al conjunto de contribuyentes, los asesores fiscales señalan cinco que afectan directamente a quienes desarrollan una actividad económica por cuenta propia, como las contribuciones a los planes de pensiones. Todas ellas están disponibles hasta el próximo 31 de diciembre.

1. Las aportaciones a planes de pensiones permiten reducir la base imponible
2. Las inversiones en activos nuevos pueden deducirse si se realizan antes de final de año
3. La amortización de vehículos eléctricos ayuda a rebajar impuestos
4. Un “buen momento” para revisar si conviene seguir en módulos o pasar a estimación directa
5. Otras medidas que pueden aligerar la carga fiscal de los autónomos

Las aportaciones a planes de pensiones permiten reducir la base imponible

En este sentido, los sistemas de previsión social siguen siendo una de las herramientas más útiles para ajustar la renta sujeta a tributación antes del cierre del año.

La guía de AEDAF recuerda que el límite general para cualquier contribuyente se mantiene en 1.500 euros, pero los trabajadores por cuenta propia disponen de varias vías para ampliar ese tope si destinan dinero a determinados planes vinculados a su actividad.

El documento detalla que los ingresos realizados en un plan de empleo pueden elevar el límite en 8.500 euros siempre que exista una contribución empresarial, e indica que este supuesto incluye el del empresario individual que actúa como promotor y partícipe de su propio plan. Es decir, un autónomo puede ser considerado “empresa” a estos efectos y reducir en 10.000 euros el importe sobre el que se calcula el impuesto.

Además de este incremento, la publicación recoge otra posibilidad dirigida específicamente a trabajadores por cuenta propia que utilicen los nuevos instrumentos introducidos tras la reforma de 2022. Se trata de las sumas destinadas a planes de pensiones sectoriales para autónomos o a los planes de empleo simplificados, que permiten ampliar el límite en otros 4.250 euros.

Tal y como explican los asesores, estas cantidades deben ingresarse en productos diseñados específicamente para este colectivo. En total, un trabajadores por cuenta propia que participe en uno de estos planes puede reducir su renta sujeta a tributación hasta 5.750 euros, y quienes además actúan como promotores de un plan de empleo pueden combinar ambos incrementos y alcanzar reducciones de hasta 14.250 euros al año.

Aunque no hay cambios normativos respecto al año anterior, la asociación recuerda que estas contribuciones pueden realizarse hasta el 31 de diciembre, lo que permite al autónomo ajustar su declaración del próximo año incluso en las últimas semanas del ejercicio.

Las inversiones en activos nuevos pueden deducirse si se realizan antes de final de año

Otra vía al alcance de los profesionales consiste en aplicar la deducción por inversión en activos nuevos afectos a la actividad, siempre que la adquisición se realice este año y el bien entre en funcionamiento antes de finalizarlo.

La normativa permite deducir el 5% de los rendimientos netos de la actividad (o el 2,5% en el caso de autónomos sin asalariados) destinados a la compra de elementos nuevos del inmovilizado. Esto incluye maquinaria, equipos informáticos, mobiliario, herramientas o incluso inmuebles afectos a la actividad.

La amortización de vehículos eléctricos ayuda a rebajar impuestos

También continúa vigente la libertad de amortización para determinados vehículos eléctricos y para las infraestructuras de recarga vinculadas a la actividad económica.

La AEDAF puntualiza en su guía que los empresarios y profesionales pueden amortizar libremente estos elementos siempre que se trate de vehículos nuevos que entren en funcionamiento en 2024 o 2025. Esta medida permite, por tanto, acelerar gastos y reducir el rendimiento neto del año.

Un “buen momento” para revisar si conviene seguir en módulos o pasar a estimación directa

Los asesores fiscales recuerdan a los autónomos que “quizás sea este un buen momento para hacer un análisis de la situación y ver qué puede resultar más ventajoso”, en referencia a revisar si conviene mantenerse en módulos o pasar a estimación directa.

Aunque no se trata de una deducción, la elección del régimen puede marcar una diferencia significativa en la factura fiscal. Por tanto, recomiendan valorar esta decisión antes de final de año, ya que la renuncia a módulos puede formalizarse en diciembre o de forma tácita a principios del ejercicio siguiente presentando el pago fraccionado del primer trimestre a través del Modelo 130.

Otras medidas que pueden aligerar la carga fiscal de los autónomos

A todas estas estrategias tributarias hay que sumar las deducciones que afectan a todas las personas físicas y que los autónomos también deben tener en cuenta.

Entre ellas, los asesores fiscales subrayan una nueva deducción para rentas bajas que puede llegar a los 340 euros, un incremento de los beneficios fiscales para familias numerosas y monoparentales, y mejoras en la deducción por donativos, que permitirá deducir el 80% de los primeros 250 euros aportados.

El resto de medidas de la guía (como las deducciones por eficiencia energética en vivienda, la exención por trabajos realizados en el extranjero, los vales de comida o la compensación de pérdidas y ganancias del ahorro) afectan a todos los contribuyentes y pueden resultar útiles en función de las circunstancias personales de cada uno.

En conjunto, la AEDAF concluye que, aunque el ejercicio 2025 no introduce novedades fiscales relevantes para los autónomos, sí existen herramientas que todavía pueden aplicarse en las últimas semanas del año para rebajar el IRPF.

En este sentido, las aportaciones a planes de pensiones, las inversiones relacionadas con la actividad y el resto de medidas que señala la asociación permiten a los trabajadores por cuenta propia optimizar su próxima declaración de la renta.