Homenaje a las empresas familiares de Galicia: la asociación que les representa cumple 25 años

La Asociación Gallega de la Empresa Familiar celebró esta semana su 25 aniversario en una gala donde reunión a autónomos y pequeños negocios familiares para reconocer la labor de las empresas fundadoras de esta organización regional.

El evento celebró los 25 años de continuidad de la asociación representando a las pymes familiares, en un tejido empresarial con gran peso de los pequeños negocios regentados por distintas generaciones.

El acto, celebrado en Santiago de Compostela, se centró en los retos futuros, especialmente en un escenario empresarial más complejo y cambiante que afecta directamente a los negocios familiares. Y al reconocer a 17 negocios, recordó la importancia de garantizar el relevo generacional.

La propia apertura del encuentro incluyó una reflexión sobre la evolución tecnológica, que desde hace años condiciona la forma en que los negocios se relacionan con clientes y proveedores. También se destacó el papel de la empresa familiar como motor económico en Galicia.

Premios para reconocer el legado y la continuidad de las empresas familiares

El acto central de la gala incluyó una mesa redonda dedicada al legado empresarial, en la que participaron representantes de distintas generaciones de firmas familiares. La conversación abordó cómo influyen los cambios tecnológicos, el mercado global y la mayor complejidad regulatoria en el día a día de los negocios familiares.

Las intervenciones recalcaron la importancia de asegurar la continuidad, especialmente en sectores donde el traspaso generacional resulta determinante para la supervivencia del negocio. Las familias empresarias explicaron cómo gestionan esta transición.

Uno de los aspectos más comentados fue la necesidad de formación específica, considerada clave para que los sucesores puedan afrontar un entorno cada vez más exigente. También se subrayó la relevancia de la profesionalización interna.

Los participantes coincidieron en el valor de mantener la identidad, un elemento que consideran diferencial para competir en mercados más abiertos y diversificados. La autenticidad del negocio familiar sigue siendo percibida como un activo.

Premio a la contribución sostenida durante los 25 años de la asociación

Tras el coloquio se entregaron los reconocimientos a las empresas fundadoras, como homenaje a su contribución sostenida durante los 25 años de la asociación. Las compañías valoraron el galardón como un respaldo a su trayectoria.

Las empresas familiares representan tradición y arraigo, pero también capacidad de innovación.

En el acto se destacó el esfuerzo realizado para adaptarse a cambios económicos, tecnológicos y regulatorios en un cuarto de siglo especialmente dinámico para los pequeños y medianos negocios. Las trayectorias premiadas reflejan la resiliencia del sector.

Las intervenciones institucionales apuntaron al peso de la empresa familiar en Galicia, que constituye buena parte del tejido productivo y mantiene empleo estable en todas las comarcas. También se valoró el arraigo territorial.

Uno de los discursos recordó cuatro avances logrados por la asociación relacionados con la reducción de dificultades normativas, la mejora de la coordinación interna y el crecimiento de la visibilidad pública. Estos logros han fortalecido al sector.

Un cuarto de siglo de cambios y transformación

Durante la ceremonia se repasaron los acontecimientos vividos desde la fundación de la asociación, ocurrida el 14 de enero del año 2000. Se destacó cómo han evolucionado tanto Galicia como la actividad empresarial en este periodo.

Uno de los ejemplos utilizados fue la transformación tecnológica, desde los primeros sistemas WIFI y conexiones de 56 kilobytes hasta las velocidades actuales. El contraste sirvió para ilustrar la rapidez con la que se ha acelerado la innovación.

Se recordó que esta evolución tecnológica ha trascendido al ámbito de la economía y la política, generando entornos más volátiles en los que las empresas deben adaptarse con rapidez. Este fenómeno afecta especialmente a los negocios familiares.

También se subrayaron los dos objetivos con los que nació la asociación: mejorar la competitividad jurídica e impositiva de las empresas familiares y visibilizar su aportación a la economía gallega. Ambos permanecen vigentes.

Mirada hacia el futuro empresarial gallego

La gala concluyó con una reflexión sobre el papel que jugarán las nuevas generaciones, que tomarán el relevo de aquí al año 2050. Se planteó la necesidad de prepararlas para un escenario más fragmentado, global y exigente.

En las intervenciones se destacó que las empresas familiares representan tradición y arraigo, pero también capacidad de innovación. Este equilibrio será fundamental para afrontar los próximos años.
Se valoró igualmente la implicación de estas compañías en los proyectos estratégicos de la comunidad, puesto que la estabilidad y permanencia de los negocios familiares aporta una base sólida para el desarrollo económico.